Recuerdo cuando era más chica y escribía sobre otras cosas. Sobre pensamientos abstractos. Filosofaba. Sobre la vida. Sobre cosas que creía sentir. Sobre cosas de las que había que reflexionar. Y ahora... ahora todo es sobre el amor. Más bien, sobre ti. Se supone que mientras más inmaduros somos, más creemos en el amor. O en esa ilusión. Conmigo es al revés. Creo que mientras más crezco, más creo en él. Cada día es más importante. Es lo que básicamente me hace escribir aquí cada día. Pero en el fondo eres tú. 65 entradas... y todas para tí. Bueno... unas 57(?. Aún así. Me impactó darme cuenta que cada cosa que escribo gira en torno a tí...
Creo que no cabe nada más en mi cabeza. Es como si no tuviese nada más en mente que tu cara, tus ojos, a ti. Debería odiarte por eso. Por ser antipático. Mala onda. Por molestarme. Por aceptar que eres el tipo más pesado del universo. ¡No sé cómo te soporto!. Creo que son cosas que pasan. Bueno, el punto es que no hay nada más sobre lo que quiera escribir. Nada me inspira tanto. Nada hace que las palabras salgan solas como lo haces tú. A nadie le había escrito tanto. Antes era él, y te mencionaba. Eras como un fantasma. Ahora todo lo demás es como un fantasma. Lo único más nítido eres tú. O eso parece, por todo lo que escribo. Me gustaría verte actuar. Aunque sea una sola vez. ¿Por qué?... no lo sé, supongo que... porque te amo.
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hueás que piensa la gente